martes, 16 de noviembre de 2010

El circo sí tiene dramaturgia, genera emociones...


Desde sus orígenes, cada acto de circo  tiene su propia dramaturgia, tal fue el postulado que defendió el maestro Julio Revolledo Cárdenas, quien acudió con la representación de la Universidad Mesoamericana, durante el encuentro binacional de dramaturgos que se celebró recientemente en la ciudad de Tijuana, estado de Baja California, México.
 Durante dos horas el maestro Julio Revolledo  explicó -a un ávido público internacional que empieza a introducirse en el conocimiento de la teoría circense-, que a futuro es necesario que se profundice en el trabajo de la construcción dramatúrgica en el circo, tal es la tendencia en las nuevas líneas de circo contemporáneo, que es tomada por las propias escuelas de circo o empresas privadas de circo a nivel internacional.
Cabe señalar que la conferencia del historiador circense que estuvo programada para cincuenta minutos se extendió a hora y media y el público se quedó con deseo de conocer más, porque era la última conferencia del día y ya no podía extenderse.
Sin embargo, parte de la concurrencia  expresó públicamente la necesidad a que invitaran al maestro Revolledo a dar un taller completo de una semana que les permita conocer realmente cómo se construye la dramaturgia circense, pero donde también se hable de los aspectos teóricos el circo porque hay poca investigación al respecto y es sabido que en México el Centro Mexicano de Desarrollo de las Artes Circenses junto con sus estudiantes ahonda ya estos temas.
En su disertación, Revolledo Cárdenas manifestó que no se puede negar al acto de circo su propia dramaturgia, lleva una intensión de generar emociones, es una pequeña obra de 6 minutos, que tiene un entretejido especifico, y  no forzosamente va vinculado de uno sencillo a lo complicado.
Las propuestas más sofisticadas llevan un vestuario y música,  asociado a la idea final que se quiere transmitir; otras no, otras caen en lo meramente deportivo, pero a eso tampoco no se puede negar la existencia de una dramaturgia, pues hay un trabajo de entramado de acciones para la construcción de un acto y la intensión de generar emociones concretas.
Asimismo habló sobre cómo el circo tradicional tiene su mensaje claramente dirigido a los niños, y su estructura está hecha para divertir a la familia.
Al respecto el conferenciante dijo que éste es un espectáculo históricamente concurrido por personas de todas las edades, aunque nomalmente el circo pierde  a los jóvenes en etapa de discoteca, esto es de los 14 años hasta que se casan, y vuelven a regresar al circo con sus hijos, para contemplar a los animales y para maravillarse de las proezas de los seres humanos.
El auditorio escuchó sobre la dramaturgia de la escena, dramaturgia del actor y de una dramaturgia de la obra  total del circo que apenas se empieza a incorporar en México, no obstante que la dramaturgia en cuanto al acto mismo existe desde tiempos inmemoriales.
Así, tuvieron oportunidad de escuchar esta disertación personas dedicadas al teatro en Veracruz, Mérida, Oaxaca,  así como desde la Unión Americana.

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